Páginas del blog

domingo, 11 de noviembre de 2012

Serpiente Precolombina


Serpiente Precolombina (Cosmovisión de Culturas Originarias)                                                                                                                                  En lengua Quechua se la llama Amaru y según las Culturas Precolombinas Andinas es una de las representaciones realizadas sobre cerámicos, rocas y textiles de mayor difusión;  es el símbolo que representa a Pacha Mama (Madre Tierra), especialmente en el Noreste Argentino, creadora de vida, fertilidad y la buena cosecha. Amaru se halla en el Mundo Supremo (Hanan Pacha) como el símbolo Hatun Amaru, pero también en el Mundo subterráneo (Uray Pacha) como Sacha Mama. Es la representación de fuente u origen del agua: Yacu Mama y como símbolo funerario representada como Ashpa Machájhuay o serpiente de tierra. En el Mundo Terrestre (Kay Pacha) del día y la luz aparece como repetición cíclica y alternancia de las eternas polaridades: día- noche  luz – sombra,  malo – bueno, representada en forma bicéfala, también es la representación de la gran  Serpiente Cósmica Solar que invierte su sentido  bipolarmente, ya que se enrolla y desenrolla en direcciones opuestas, según se trate del Mundo Terrestre o del Mundo Subterráneo (el día se enrolla en la noche y la noche en el día, al igual que la alegría en la tristeza, salud en la enfermedad y la vida en la muerte. También se vincula a la serpiente en las urnas de la Cultura Santamariana como dadora del agua y la lluvia, en otras culturas precolombinas era interpretada a la serpiente como espíritu de los antepasados o del difunto, cuyo Doble o Alma era capaz de alojarse y salir de noche de las urnas funerarias.

Leyenda Andina de Amaru                                                                                                                        Amaru es una serpiente gigante que avanza con una cabeza bajo la tierra que devora lo que allí encuentra y la otra en el cielo que regurgita de acuerdo a lo que la otra traga. Esta creencia coincide con la costumbre de alimentar la tierra durante las ceremonias a Pacha Mama, para propiciar bienestar futuro.          


sábado, 20 de octubre de 2012

PRINCIPIO DE DUALIDAD Y OPOSICIÓN ANDINA

PRINCIPIO DE DUALIDAD Y OPOSICIÓN ANDINA

Un principio de las culturas andinas precolombinas fue el de dualidad y oposición, como generador y organizador del cosmos, formadas por dos fuerzas contrapuestas pero complementarias. La característica de la dualidad y oposición es la simetría en sus diversas variantes, es decir aquellas en que la imagen se forma por el enfrentamiento de mitades prácticamente iguales a ambos lados de un eje central. Estas imágenes duales y opuestas generalmente representan dos aspectos diferentes de lo mismo, como MASCULINO – FEMENINO JOVEN – VIEJO, DÍA – NOCHE. La dualidad a través de la bipartición en pares de opuestos, simétricos y complementarios es el sustento de la concepción andina sobre el origen del cosmos y de sus deidades, basada en la idea de que todo se forma a partir del desdoblamiento y particiones sucesivas. Nada existe como un ser único ni está aislado en el universo, todo lo que existe tiene su par, su opuesto complementario.

lunes, 20 de agosto de 2012

Culturas Precolombina del Noroeste argentino

WAKIN (Resto)


Nuestro trabajo WAKIN que en voz quechua significa resto es la representación de una porción de cerámica o roca tallada con motivos precolombinos. Está basado en la cosmovisión y simbologías precolombinas del territorio argentino. En el centro de la pieza se encuentra tallada la AYJAÑA (voz aymara) cruz, dos palos cruzados iguales, se relaciona con la cuadriparticiòn del espacio andino, con los cuatro elementos, los cuatro puntos cardinales, muy frecuente en las culturas del Noroeste argentino desde los periodos iniciales. Rodeando esta figura se encuentra la CHAKANA (escalera entre los quichuas, cruz del sur entre los aymaras). Uno de los mitogramas más antiguos de la simbología andina. Aparece con gran frecuencia en la cerámica del Noroeste argentino, como derivación de la cerámica boliviana y peruana preexistente. Cuando su sentido es escalera hacia arriba representa el Hanan Pacha, lo masculino, el sol, el día, la luz, el poder. Cuando la escalera es hacia abajo, alude al Uray Pacha, lo femenino, la luna, la sombra, la noche, el mundo de abajo o subterráneo. Con frecuencia se dan combinados, como una repetición continua Hanan – Hurin: ascenso – descenso; vida – muerte. El origen de esta iconografía es milenario y se remonta a 4200 años en Chavín (Perú). Este dibujo está conformado al menos por tres rectángulos verticales superpuestos, los que dan como resultado un romboide sagrado escalonado. Aparece en nuestras regiones culturales, tanto en la andina como en la patagónica y culturas pampeanas. A ambos lados de la figura central se encuentran dos guardas representando el mitograma del tipo Hanan Hurin: enlaza y conecta ambos mundos. El mundo de arriba y de abajo se interconectan místicamente atreves de dos líneas que se envuelven y se desenvuelven, de tal manera que una de ellas conduce al mundo de arriba (Hanan Pacha) y la otra conduce al mundo de abajo (Uray Pacha). Encontramos triángulos místicos escalonados que simbolizan el viaje al Uray Pacha o mundo de los muertos. Completan el trabajo dos figuras dos círculos concéntricos representando un ojo de ave y dos espirales dobles sin cabezas.

CULTURA LA AGUADA TUSUQ (Bailarín)


En Ancasti, Provincia de Catamarca, Noroeste argentino, rodeada de un extenso bosque de cebiles, se encuentra el parque arqueológico de La Tunita donde existen más de veinte aleros que en su interior se encuentran pinturas rupestres de gran valor artístico y simbólico. En todos los casos de estas pinturas hay una ideología dominante e identificable en sus manifestaciones artísticas entre estas representaciones se destaca una de aspecto felínico: el tigre o jaguar de Aguada. Las representaciones rupestres demuestran la existencia de un chamanismo poderoso y el desdoblamiento de la personalidad, debido al uso de plantas psicoactivas, como especialmente el cebil, considerada como planta sagrada por estos pueblos, entre una deidad felínica y el hombre que se feliniza. En nuestro trabajo Tusuq que en lengua quechua significa Bailarín es la representación de estilos utilizados por la cultura precolombina de La Aguada en estos aleros, la imagen central corresponde a Tusuq (bailarín) probablemente “el sacrificador” portando una flecha en una mano y en la otra un arma, utilizando una máscara felínica y practicando una danza frenética; completan nuestro trabajo: aves, cruces, símbolos, dos tipos distintas de representaciones del jaguar, personajes humanos ataviados con los símbolos del poder chamanico, personajes con armas y objetos triangulares en sus manos que podrían estar representando a cuchillos o banderines.

domingo, 11 de marzo de 2012



CULTURA LA AGUADA
Se desarrolló entre los años 650 a 950/1000 DC, fecha dinámica como fruto de nuevas investigaciones y hallazgos arqueológicos y estudios antropológicos que modifican fechas y lugares. Esta cultura reemplazó a la llamada cultura Draconiana o de los Barrearles. Tuvo epicentro en el Noroeste del actual territorio Argentino, en la Provincia de Catamarca, en el Valle de Catamarca y su prolongación hasta el norte, el Valle de Ambato. Ocupó la Provincia de La Rioja y parte de San Juan, se extendió desde la actual capital de La Rioja y la Ciudad de Patquía hacia el este, en los límites con la Provincia de Catamarca y Córdoba; también tuvo su desarrollo en partes de los Valles Calchaquíes, al norte del Valle Hualfin; se han encontrado restos de cultura Aguada en el occidente de la actual Provincia de Tucumán. Se desarrollo también en los Valles del sur de Salta, en la actual ciudad de La Paya.
Nuestro trabajo Runa Uturungo lengua quechua cuyo significado es “Hombre Felino”. En la mitología andina una de las representaciones más misteriosas que encarnaba “al más allá” o Mundo de los Muertos; era creencia que el uturungo salía de noche, pero que al llegar el día recobraba la forma humana. Uno de los fenómenos del chamanismo aborigen, consistía en atribuirle al chaman el poder de convertirse en “Tigre o jaguar” durante la noche a la luz de la luna , para lo cual era preciso un ritual previo a fin de entrar en trance por medio de la ingesta de plantas sagradas o “planta de los dioses” (Cebil, Cactus de San Pedro, Hongos, Ayahuasca, que son todas alucinógenas).La luz solar reintroducía el poder del Hanan Pacha o Mundo Supremo con lo que se disipaba el trance místico o la videncia, relacionada con la noche y el Uray Pacha o Mundo Subterráneo. El Uturungo es el felino de la mitología andina y en especial del Noroeste argentino, ampliamente representado en mitogramas desde los periodos iniciales de nuestra arqueología.